HISTORIAS DE DRAGONES

En ocasiones, podemos querer mucho a nuestra pareja pero no nos damos cuenta de sus necesidades de crecimiento.
CRECIMIENTO PERSONAL
Nos han enseñado que tenemos que hacer absolutamente todo juntos, sin darnos el espacio necesario para el crecimiento personal por separado.
Nuestra pareja puede ser como ese dragón del cuento y tenemos que permitir su crecimiento. Teniendo bien claro los tres espacios que se generan en toda relación de pareja: el tuyo, el mío y el nuestro.
El amor no consiste en cambiar a nuestra pareja para que se convierta en aquello que nosotros necesitamos sino en dejar que bata sus alas y que se convierta en la persona que desea ser.
Te puede pasar, no sólo con tu pareja; también con tus hijos y otras personas cercanas: personas que quieres moldear a tu gusto sin darte cuenta que no les estás dejando la libertad de convertirse en las personas que son de verdad.
UN RETO QUE MERECE LA PENA
Que no sea sencillo no significa que sea lo correcto y que el reto merezca la pena si de verdad quieres a esa persona.
Busca tus dragones y date permiso para dejarlos volar siendo tal y como son.
Si quieres saber cómo ponerlo en práctica, te quiero proponer unos ejercicios sencillos. Para recibir estos ejercicios sólo tienes que registrarte en www.rosamontana.com y te llegarán al correo la semana que viene.