Me encantan las terapias tipo “Jeckyll y Hyde” cuando me llegan a consulta. Y no es que sea masoquista, no.

PASIVO-AGRESIVOS

Suelen ser más mujeres que hombres, aunque también los hay, que consultan porque dicen no poder más con su relación de pareja.

Se quejan de su inactividad y procrastinación; de su tendencia irrefrenable a poner excusas y objeciones; de su falta de interés por todo.

Y sólo, cuando se tensa la cuerda un poco más de la cuenta y se le insta a la acción, es cuando aparece su carácter agresivo con control autoritario. 

En esos momentos la persona pasivo-agresiva echa en cara de su pareja un montón de mierda que había estado guardando a lo largo de los tiempos.

Tanto es así, que estas personas comienzan a sentir miedo a la reacción de sus parejas y terminan por no decirles nunca nada más.

CHANTAJE EMOCIONAL

La siguiente fase es la de chantaje emocional: con la que sitúan la responsabilidad de su agresividad fuera de ellos mismos.

Esta situación, la de encontrarse conviviendo con una pareja pasivo-agresiva, es más frecuente de lo que se piensa. 

Este tipo de personas suelen vivir una situación de “ni contigo ni sin ti”: no están cómodos al lado de la pareja pero no soportan que, por otro lado, se alejen de ellos.

Su único motivo por el que pasan a la acción es cuando sienten la amenaza de la pérdida: bien perder a la pareja, o bien perder a los hijos…

Esto les hace reaccionar desde el dolor, el miedo y la ira con agresividad. Y, si no funciona, suelen pasar a una fase en la que utilizan el chantaje emocional para lograr sus propósitos.

PESIMISMO CONTAGIOSO

En estas condiciones, muchas personas pasivo-agresivas pueden aceptar un acuerdo de mínimos con sus parejas que en ocasiones incluye el ámbito sexual.

El pesimismo contagioso es otra de las características comunes de estos sujetos. La idea de “ todo va a ir mal” hagan lo que hagan es muy frecuente en su carácter.

La manera de salir del círculo vicioso que supone una relación de pareja con una persona así, pasa por aceptar que no se les puede ayudar porque, en el fondo, no quieren ser ayudados y prefieren seguir en su cómoda situación de pesimismo exacerbado.

Lo que debes hacer es pensar en trabajar por y para ti. Darte cuenta de que el chantaje va a aparecer y eso no es motivo para abandonar la vida que se tiene. 

Así que, si estás cerca de una pareja “Jeckyll y Hyde”, ya sabes que debes dar un paso adelante y pasar a la acción porque eres el único que puedes poner solución a esa situación.

No va a ser sencillo, sino todo un reto. Pero, si trabajas muy bien tu autoestima y asertividad, y sabes en todo momento cuál es el siguiente paso a dar, las cosas serán un poco más sencillas.

Yo puedo ayudarte. Sólo tienes que contactar conmigo en rosa@rosamontana.com que estaré encantada de leerte y ayudarte.